El arbitraje de la Liga Cordobesa de Fútbol ha despedido a una de sus figuras más emblemáticas.
Mario Tello colgó el silbato tras completar una trayectoria que se extendió por más de tres décadas. Tello es considerado una leyenda del arbitraje de la LCF.
Su extensa carrera comenzó en el año 1993 y marcó el final de su servicio el pasado sábado, cuando dirigió su último partido en la cancha de Bella Vista.
Durante sus 31 años en las canchas de Córdoba, Tello fue mucho más que un juez. Se le reconoce como una pieza clave y un pilar que, gracias a su dedicación y autoridad, se encargó de garantizar que el balón siempre rodara en el fútbol de la ciudad.
Desde su primer pitazo hasta su emotivo cierre, Tello fue un testigo privilegiado, presenciando innumerables goles, grandes hazañas y la pasión inigualable que se vive en las canchas cordobesas.
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La longevidad y la precisión de la carrera de Mario Tello en la Liga Cordobesa pueden compararse con el ritmo constante y exacto de un metrónomo que, por 31 años, garantizó la armonía del juego. Aunque el metrónomo se detenga, su contribución a la música (o al fútbol, en este caso) permanece grabada.
Fotos: Cronometroencero18.
